En la Reserva Natural Victoria, durante la floración de árboles de diomate (Astronium graveolens, Anacardiaceae), se observó el escarabajo esmeralda (Macraspis sp), una verdadera joya rutilante de extraordinaria belleza, de color verde metálico, iridiscente rojizo. Este pequeño cucarrón o escarabajo fitófago del orden Coleoptera (familia Melolonthidae, subfamilia Rutelinae), ha deslumbrado a científicos por el secreto guardado en su extraño brillo. Se descubrió en su exoesqueleto microscópicas células hexagonales especialmente dispuestas para reflejar la luz polarizada iridiscente. Se cree que es parte de una estrategia evolutiva para ser "invisible" a sus enemigos. Esta muestra del potencial de la biodiversidad tropical que aún queda en el bosque seco de Melgar (Tolima) tiene enormes posibilidades de aplicación tecnológica (Science 24 July 2009: Vol. 325. no. 5939, pp. 449 - 451), (http://www.eurekalert.org/pub_releases_ml/2009-07/aaft-t072009.php). Este escarabajo como muchas otras especies, estan amenazadas por la degradación de su hábitat natural y por el tráfico ilegal. Los investigadores Amat-García y otros (2005), en su publicación "Guía para la cría de escarabajos" muestran una excelente ruta para su conservación y manejo sostenible.
